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viernes, noviembre 8, 2024
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Real Madrid sufre y se congela en Moscú

Redacción – Crisis es la palabra que define la situación del Real Madrid. Desde el gran partido que hizo ante la Roma, el equipo blanco sólo ha ganado uno de los cuatro partidos que ha jugado en los que sólo ha marcado un gol, el del triunfo ante el Espanyol.

Desde entonces, perdió contra el Sevilla, empató contra el Atlético y cayó en Moscú frente al CSKA. Un panorama muy triste y preocupante para este Real Madrid que está de capa caída y al que le cuesta un mundo marcar, lo que empieza a mostrar que echa mucho de menos a Cristiano y más aún si no tiene a Bale en el campo.

Eso pasó ante el CSKA donde los blancos llegaban con las bajas del ya mencionado Bale, Isco, Marcelo y Sergio Ramos. Cuatro hombres clave en este Madrid de Lopetegui al que definitivamente, Rusia no le sienta nada bien.

La Champions, la competición que normalmente resucita a los blancos no funcionó en Moscú donde a los 65 segundos, el CSKA ya había marcado por mediación de Vlasic aprovechando un regalo de Kroos y la endeblez de Varane. Keylor, titular, no pudo hacer nada para evitar un gol que obligaba a los blancos a ir a contracorriente. El Madrid quería, pero ni sabía ni podía batir a un CSKA bien encerrado atrás y que creaba mucho peligro a la contra.

Los blancos se hicieron con el control del balón, pero la solución para encontrar el gol eran centros laterales que no encontraban rematador y facilitaban mucho la tarea defensiva a los rusos. Con Ceballos, Marco Asensio y Benzema desaparecidos, el Madrid no aparecía más que por los centros de Reguilón, debutante esta temporada, Carvajal y alguno de Lucas Vázquez que no acabó de aprovechar su primera titularidad de la temporada.

A pesar de todo, el Madrid tuvo dos ocasiones para empatar con los postes de Casemiro y Benzema en una primera mitad que acabó con la lesión muscular de Carvajal que fue sustituido por Odriozola.

El Madrid salió a por todas en la segunda mitad para buscar el empate lo más rápido posible, pero seguía sin encontrar el ansiado gol. Marco Asensio apareció en el partido, pero no era suficiente. Lopetegui quemó sus naves sacando a Modric y Mariano y quitando a Casemiro y Lucas Vázquez. El Madrid iba a por todas, pero era incapaz de superar a un CSKA que esperaba atrás atento a los fallos blancos para salir a la contra. Así, pudo marcar en un par de ocasiones. La primera lo evitó Nacho y después Keylor Navas con una gran parada.

El Real Madrid quería pero no estaba visto que no era su noche. El que más cerca estuvo fue Mariano que envió un balón al poste en el minuto 90, el tercer palo del Madrid en el partido. Varane tuvo la última en el 95’, en jugada que acabó con la roja a Akinfeev, el meta del CSKA. Fue el canto del cisne de un equipo blanco sin gol y que está en caída libre

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