Redacción – Un tuit de Naomi Osaka el 11 de febrero creó asombro en el tenis mundial femenino. “Hola a todo el mundo. No trabajaré más con Sascha. Le doy las gracias por su trabajo y le deseo lo mejor en el futuro”. La japonesa anunciaba que dejaba de trabajar con el técnico serbio Sascha Bajin, a quien fichó en diciembre de 2017 yt con quien ganó en 2018 Indian Wells y US Open.
El comunicado llegaba después de un nuevo éxito de la nipona, campeona del Open de Australia 2019 y nueva número uno mundial. Este domingo, en Dubai, donde vuelve a la competición, la japonesa explicó que la idea de no seguir con Sascha se gestó “durante el Abierto de Australia, y creo que vosotros también os disteis cuenta”, indicó a los periodistas en rueda de prensa recogida por el WTA Tour.
“Todos piensan que fue un problema relacionado con el dinero, pero no lo fue. Es una de las cosas más hirientes que he escuchado. A cada miembro de mi equipo lo veo como parte de mi familia. No les haría nada de eso”, en relación al a cuestión económica.
Osaka insistió en que “no voy a decir nada malo de Sascha, porque por supuesto estoy realmente agradecida por todo lo que ha hecho”.
