Manchester City no es el mismo que el del Triplete y volvió a demostrarlo ante Crystal Palace en la fecha 17 de la Premier League: ganaba 2-0, controlaba el juego pero se dejó empatar en los minutos finales.
Parecía un trámite para el equipo de Guardiola. Todo inició con un buen gol de Jack Grealish, que tras revisión de VAR fue confirmado. Las Águilas prácticamente no incomodaron a Ederson en todo el juego y su principal función fue la de impedir más goles, al menos hasta el último tramo del compromiso.
Las cosas se complicaron aún más para la visita cuando, en la segunda etapa, Lewis amplió diferencias para los de Guardiola, que ya se regocijaba con lo que era prácticamente un triunfo sellado. Sin embargo, Crystal Palace encontró una pequeña respuesta a los 76 y se envalentonó para arrebatarle el triunfo al City.
Mateta concretó el primer descuento, que sirvió de alerta para un equipo que demostró ser falible en este tramo de temporada 2023. Ya cuando el partido estaba en su tramo final y al City solo le quedaba defender para impedir la anotación, Phil Foden cometió un penalazo a los 92 y el juez no dudó: sancionó la pena máxima, que recayó en los pies de Olise.
El jugador de Palace enfrentó a Ederson y, con mucha calidad, lo engañó con un toque de zurda esquinado que significó la agónica igualdad y un nuevo mazazo para los Citizens.
Con este resultado, Machester City llegó a su tercer juego como local sin conocer la victoria en Premier, algo que no le ocurría desde hace siete años. Quedó con 34 puntos y Liverpool le sacaría seis de ventaja en caso de que se imponga ante Manchester United en este fin de semana.
