Redacción – El combinado de Gareth Southgate ha sido noticia estas dos últimas semanas por los síntomas de progreso pero también por los insultos de índole racista que recibió Sterling en Montenegro. Una lacra global que en parte se explica por la aparición de partidos de extrema derecha en Europa. De ahí que Guardiola subrayara que “es un problema que va más allá del fútbol”, si bien es cierto que el deporte “es una arma poderosa para combatir y defender los principios de la humanidad”.
Un asunto espinoso que se hizo un hueco entre la tensión deportiva que existe en esta recta final: “Es fácil regresar a la competición”, aseguró Pep, que recupera a Fernandinho, Kompany, Mendy y De Bruyne para enfrentarse al Fulham: “Estuvieron cerca de conseguir algo positivo ante rivales como el Chelsea o el Liverpool. No miro a la tabla sino a lo que hacen y será peligroso”, asumió el catalán, que insistió en la regularidad de Mendy como algo necesario para que no se pierda todo el potencial que atesora.
El choque del City se avanza al del Liverpool, oportunidad para el campeón para acomodarse de nuevo en el primer puesto: “El calendario es el que es”, se limitó a comentar Guardiola, que evita pensar mucho más allá y en cuántos compromisos quedan -quince en el mejor de los casos- para acabar el curso: “El año pasado volvimos bien del último parón pero es cierto que no tuvimos a un contrincante como el Liverpool”, dijo en su vuelta a Manchester, en la que aprovechó para felicitar a Solskjaer por su puesto.