Se acercan las elecciones presidenciales en Barcelona y los candidatos están alzando la voz para convencer a los socios de por qué tienen que ser los elegidos para liderar al conjunto azulgrana. Entre los favoritos se encuentra Joan Laporta, quien ocupó el cargo entre 2003 y 2010.
En una entrevista con el canal de Youtube Iniestazo, además de revelar cómo fue la divertida historia del fichaje de Rafael Márquez por 5 millones de euros, también recordó la vez que pudo contratar a Cristiano Ronaldo por un valor que hoy sería imposible de conseguir.
Todo ocurrió cuando se produjo el traspaso del defensor mexicano. Allá, por el 2003, el central llegaba procedente del Mónaco gracias a las gestiones que había realizado su agente Jorge Méndes, quien también manejaba la carrera de un joven CR7 que por ese entonces militaba en el Sporting de Lisboa (Portugal).
Fue durante las conversaciones con el zaguero, cuando el representante puso sobre la mesa el nombre de Cristiano Ronaldo. Sin embargo, Laporta se vio obligado a desestimar la propuesta a pesar de que el precio parecía ser accesible.
“Sí, acabábamos de fichar a Ronaldinho y a Rafa Márquez. La gente de Márquez nos propuso fichar a un chico que se llamaba Cristiano Ronaldo, que en ese momento estaba en el Sporting de Lisboa”, recordaba.
“Me abordó y me dice ‘hay un jugador que lo tengo vendido ya al United por 19 millones, a ustedes se los dejo en 17’, pero nosotros habíamos invertido ya en Ronaldinho”, explicó.
“En ese momento (Cristiano) jugaba más en la banda que en el centro, pensábamos que con la inversión que habíamos hecho con Ronaldinho estaba más que cubierta. No me arrepiento”, sentenció.
El astro brasileño terminó convirtiéndose en una pieza indispensable para el holandés Frank Rijkaard. Junto a él, el Barcelona cosechó dos Ligas (2004/05 y 2005/06), una Champions League (2005/06), dos Supercopas de España (2005 / 06 y 2006/07) y tres Copas Catalunya (2003/04, 2004/05 y 2006/07), además de volver a recuperar una identidad clara de juego que se reforzó con la llegada de Pep Guardiola en junio del 2008.
En mayo del 2020 un ex dirigente del Barcelona contó cómo vivió esa situación desde su lado. En aquel entonces Robert Fernández, ex secretario técnico del cuadro azulgrana, trabajaba para el Valencia y viajó hasta Portugal para ver jóvenes promesas del Sporting de Lisboa.
Los dos futbolistas más destacados de ese equipo eran nada menos que Cristiano Ronaldo y Ricardo Quaresma, quienes habían llamado la atención de varios clubes de Europa.
“Había un ‘scouter’ (caza talentos) del Barça ese día también, no recuerdo exactamente quién, y hablando con él comentamos lo buenos que eran ambos. Necesitaban un extremo con capacidad goleadora. Pero al final se decidieron por Quaresma”, detalló.
Poco después del fichaje del portugués llegó Ronaldinho, quien gracias a su excelente calidad, y la mala relación del luso con Rijkaard, se adueñó de la banda izquierda.