El día que fue descalificado del US Open por haber golpeado a una jueza de línea con una pelota, Novak Djokovic se retiró del estadio sin hacer declaraciones a la prensa. Es por eso que el serbio era el más esperado en la ronda de declaraciones previa al inicio del Masters 1000 de Roma, certamen que comienza este lunes en Italia. El número uno del mundo cumplió con su presencia y, aunque ya había hecho su descargo en las redes sociales, dio su versión de los hechos por primera vez ante los micrófonos.
“Después de ese episodio estuve en shock durante dos días, tuve una gran culpa y fue una gran lección de vida”, dijo Djokovic en tono reflexivo. El serbio hizo hincapié en el estado de salud de la mujer a la que golpeó de manera accidental: “Hablé después del partido, dijo que estaba bien, que no había lesiones. Me sentí realmente mal por causarle la conmoción y el drama, no se lo merecía de ninguna manera, ella obviamente se ofrece como voluntaria, le encanta el tenis y ha estado allí durante bastantes años».
Nole calificó al incidente de “lamentable”. También dijo que fue “incómodo y decepcionante» terminar su actuación en el Abierto de los Estados Unidos de esa manera. En esa línea, reflexionó respecto de la dura sanción que recibió: «Hubo mucha especulación y discusiones sobre si (el castigo) era merecido o no, lo acepté y seguí adelante. No puedo prometer o no puedo garantizar que nunca haré algo similar en mi vida. Voy a hacer mi mejor esfuerzo, obviamente, pero todo es posible en la vida”.
“Lo acepté, tenía que seguir adelante y eso es lo que hice. Por supuesto, no me olvidé de eso, no creo que nunca lo olvide, estas cosas se quedan en tu memoria por el resto de tu vida, pero no creo que tenga ningún problema importante para volver al circuito y poder desempeñarme bien y golpear la pelota de tenis durante el punto”, recalcó. En tanto que, respecto de los comentarios que suscitó su actuación, agregó: “Es cierto que se ha hablado de ello, lo entiendo. Pero voy a seguir mi camino, consciente de lo que he hecho”.
Djokovic, que hasta su descalificación del US Open llevaba un récord de 25-0 en el año, hará su debut en la segunda ronda del Masters 1000 de Roma ante el ganador del duelo que protagonizarán el estadounidense Tennys Sandgren y el local Salvatore Caruso. El certamen italiano marcará el regreso del español Rafael Nadal (2°) a la competencia luego de ausentarse de los torneos en Estados Unidos por su preocupación en torno a la pandemia de coronavirus.