Ha hecho de todo y más en su carrera, pero Cristiano Ronaldo por sí solo a veces no es suficiente. Y de eso se empieza ya a dar cuenta Andrea Pirlo con ‘su’ Juventus con la que cosechó el primer desliz de la temporada al empatar en casa de la Roma (2-2). Los locales estuvieron cerca de llevarse los tres puntos, pero en frente tuvieron al tipo más competitivo del planeta fútbol que si no puede ganarte, al menos te va a empatar, y eso es lo que hizo.
Del ‘7’ fueron los dos goles de la Juventus como también firmó un doblete Veretout para dejar un bonito partido en tablas y no enfadar a nadie por completo.
Penaltis y carreras
La inmensidad vacía del Olímpico de Roma a la que nadie puede acostumbrarse, acogió un comienzo dubitativo por parte de los dos equipos. Si bien es cierto que la Juve se adueñó del balón, la ocasión más clara fue para la Roma. El armenio Mkhitaryan se quedó a centímetros de adelantar a los suyos, los mismos centímetros que tuvo que salvar Szczesny para ganarle el mano a mano con una buena parada.
Eso no asustó a la Juventus que siguió con su guion de partido en el que, eso sí, no había imaginado una improvisación de Rabiot. El francés, en el 30’, cometió un penalti por mano y Veretout lo convirtió en gol para la Roma (1-0).
Se envalentonó entonces Cristiano Ronaldo que entró en modo líder y empató el partido de la misma manera. El portugués provocó un penalti y lo marcó para sorpresa de nadie. Dos partidos y ninguna duda de que sigue teniendo más hambre que el resto (1-1).
Pero no todos en el cuadro ‘bianconnero’ demostraron tener la concentración del ‘7’ y, acto seguido, no pudieron neutralizar una contra eléctrica de la Roma con la que de nuevo Veretout adelantó a los suyos a pase de Mkhitaryan tras una gran carrera del frente ofensivo. La Roma se llevaba la victoria al descanso (2-1).
A partir de la segunda parte, la Juve salió enchufada en busca de la remontada sin saber que el enemigo estaba en casa. Concretamente era Rabiot, que vio la segunda amarilla en el 62’ y dejó a los suyos con uno menos para la difícil empresa de llevarse los tres puntos del Olímpico.
Pero Ronaldo no entiende de imposibles y firmó el empate solo siete minutos después. Se elevó por encima de todos y remató de cabeza un centro desde la derecha. Air CR7. Y para que no decayera el ánimo, Andrea Pirlo introdujo piernas con el ex culé Arthur, Douglas Costa y Betancur.
A todo esto la Roma tampoco se quedó conforme y, con la superioridad numérica, buscó el tercero, pero sus gladiadores ya estaban cansados. Terminó entonces el encuentro con un empate más que justo y emplazando a los de Turín a un partidazo la próxima semana: el Nápoles.