‘Black Panther’. La pantera negra. Lewis Hamilton le dedicaba el sábado la pole lograda en Spa al actor Chadwick Boseman, fallecido horas antes por un cáncer de colon. Y este domingo, en el GP de Bélgica de F1 2020, pudo cumplir con un fácil triunfo con su homenaje al actor que convirtió el primer súper héroe negro de la gran pantalla, algo que fue una auténtica revolución social para muchos. Chadwick, reconocido activista, un actor que protagonizó papeles importantes en películas con un claro mensaje político, un orgullo para la raza negra, un icono para Hamilton por su lucha por la igualdad racial, merecía una batalla épica para que Lewis señalara con su dedo al cielo para dedicarle dicho triunfo. No obstante, la superioridad de su Mercedes hizo que el inglés solo pudiera honrarle con una carrera de 44 giros de honor para el británico, en la primera posición, sin rival alguno en la lucha por el triunfo.
Bottas no es rival para Lewis
El inglés partía desde la primera plaza tras su aplastante pole del sábado ante un Bottas que un día antes le había avisado. “Tengo que atacar para mantener viva la esperanza del Mundial. En la primera curva siempre hay opciones”, decía el finlandés. Pero de nuevo, fueron palabras vacías, lanzadas al aire. En Barcelona, hace dos semanas, ya envió este aviso y no lo cumplió en la salida. Y de nuevo, en Spa el finlandés se vistió con chaqué negro para jugar de la mejor de las maneras el papel de mayordomo de Lewis que tanto aprecian en Mercedes. Bottas podía haber aprovechado el rebufo tras Hamilton a la salida de Eau Rouge en la larga recta posterior, pero le tendió una alfombra roja a Lewis y no atacó. Ello le hizo tener que mirar por el retrovisor ante un Verstappen que le tenía en el punto de mira, pero Ricciardo le hizo un favor a Bottas y atacó al neerlandés, que defendiéndose del australiano perdió su opción de pegarle un hachazo a Valtteri.
A partir de ahí, Hamilton tan solo debía gestionar su ventaja con Bottas y Verstappen para realizar parada, pero un accidente en la vuelta 11 de Giovinazzi y Russell hizo que el ‘safety car’ apareciera en la carrera, dando así la opción a todos los pilotos a realizar un pit stop gratuito. Así, las cosas en cabeza no iban a cambiar. Lo intentó Verstappen para superar a Bottas en una interesante lucha por la segunda plaza de la carrera y del campeonato, pero pese a la buena parada de los mecánicos de Red Bull, Valtteri pudo defenderse con un ‘pit stop’ veloz que le salvó por los pelos en la calle de boxes.
Quedaba ver si en la resalida tras el ‘Safety Car’ en la vuelta 15 Valtteri Bottas volvería a ofrecerle sus funciones de ‘escudero’ a Lewis u optaba por meterle el morro al campeón. La duda ofende. Volvió a quedarse detrás sin opciones de ir a por el inglés y sin tampoco entregar su rebufo a Verstappen.
‘Safety car en pista’
Desde los primeros giros, la carrera parecía más que sentenciada. Todo el pescado vendido. Con Hamilton en otro mundo. Como Chadwick en ‘Black Panther’, como el Rey T’Challa, súper héroe líder de un país ficticio africano llamado Wakanda, poderoso y muy avanzado tecnológicamente, que jamás había podido ser colonizado. Así se debe sentir en esta Fórmula 1 el inglés. Todos quieren atacarle, pero nadie puede. Todos quieren su coche, el mejor de la parrilla. Pero solo él y su compañero Bottas lo pilotan. Y con el nórdico al lado, el súper héroe es Lewis, por manos, calidad y por cualquier motivo posible. Defiende a su Wakanda particular con mayores armas que el resto y así, el de Stevenage lo tiene muy fácil, como este domingo.
Lewis incluso se pudo permitir el lujo de pasarse de frenada en la curva 5 del circuito al bloquear neumáticos en la vuelta 37. No pasaba nada, Bottas estaba a más de 5 segundos y Verstappen a 10. Un simple aviso de que no podía relajarse, pero tampoco arriesgar más de lo necesario. Debía gestionar gomas y con eso le valdría para ganar.
Triunfo número 89 de Hamilton, a 2 de Schumacher
Hamilton logró así su victoria número 89 en la F1, uno más gracias a la superioridad de su monoplaza desde 2014. En el mismo trazado en el que debutó Michael Schumacher en 1991 y en el que el alemán conquistó su primera victoria, el británico se coloca a solo dos triunfos del récord de 91 triunfos en la F1 que posee ‘el Kaiser’. Rey contra rey. La pantera negra tiene los ojos puestos en este registro, que si no pasa nada, conseguirá igualar y superar en las próximas carreras, y en el récord de 7 títulos de ‘Schumi’, al que se dirige sin oposición este curso.
La maldición de Sainz continúa
Carlos Sainz no pudo formar parte de la emocionante batalla que se repitió este domingo en la zona media de la parrilla. Mientras su compañero Norris podía volver a sumar puntos con una buena séptima posición, Carlos Sainz volvía a verse golpeado por la mala suerte, por sexta vez en 7 carreras.
El español sufrió un problema en su unidad de potencia en la vuelta de formación que derivó en un contratiempo definitivo en sus escapes, algo que le impidió tomar la salida del GP de Bélgica. Otra carrera en la que el español perdió unos puntos valiosos por cuestiones ajenas a su pilotaje.
“Son puntos tirados a la basura y estos ya no se recuperan”, aseguraba el español hace varias semanas antes de un GP de España en el que quería acabar por fin con la maldición que tenía encima. Logró ser sexto y quería que ello significara un punto y aparte en su temporada. Pero solo dos semanas después, la mala suerte volvió a darle la espalda. Ni si quiera le permitió competir. Una faena de las gordas.