River perdió en su primer partido ante Estudiantes en La Plata, siendo un pésimo inicio para el equipo millonario.
River cayó 2-1 en el quinto minuto de descuento, luego de haber estado en ventaja y ante un adversario que jugó con 10 hombres durante todo el segundo tiempo tras la expulsión de Fernando Tobio. Matías Suárez había abierto el marcador para la visita, pero Mauro Díaz y Noguera pusieron cifras definitivas en la primera fecha de la Copa de la Liga Profesional.
Los dos planes quedaron volcados en el campo de juego desde el pitazo inicial. River, con el ADN Gallardo, presión alta, juego con las bandas a partir de los carrileros y Suárez también abriendo la cancha. El Pincha, con orden, dando batalla en el medio, generando temor desde la pelota quieta y con una búsqueda directa a partir de la recuperación del balón, para terminar en el doble 9.
Cada uno con sus formas llegó al arco adversario. El local, con una arremetida de Noguera tras un balón quieto, que el Millonario desactivó en la línea. La visita, con un desborde de Angileri que conectó Borré y una aparición solitaria de cabeza de Zuculini que rechazó Andújar.
Con el correr de los minutos, Estudiantes empezó a bloquear mejor las bandas del elenco de Marcelo Gallardo. Y a incomodar la salida, ante un mediocampo sin conector, o con sólo uno: Enzo Pérez. Así, la jugada más concreta para marcar la tuvo el dueño de casa, justamente a partir de esa herramienta: a los 34′, forzó una falla en la última línea de la Banda, Federico González quedó mano a mano, pero su definición cruzada fue desviada por Armani.
Pero el planteo bien ejecutado por el Pincha recibió un duro revés en el epílogo de la etapa inicial. A los 46 minutos, Fernando Tobio le aplicó un planchazo en el pecho a Rafael Santos Borré y vio la tarjeta roja.
La expulsión provocó dos movimientos en el tablero de ajedrez. Zielinski cambió el esquema y apostó a cinco en el fondo, con Colombo por Godoy para componer la línea de 3 y Valdez como carrilero por Cauteruccio. Gallardo mutó a cuatro en el fondo y sumó un conductor, Rollheiser, como llave para encontrar más espacios.
Con un bloque de 8 hombres y las líneas bien juntas, el Pincha resistió hasta los 16 minutos, cuando la paciencia de River tuvo recompensa: Álvarez filtró con excelencia para Angileri, quien sacó el centro rasante para el ingreso goleador de Suárez. El asedio visitante siguió. A los 23, Pinola se vistió de enlace y tocó para Borré, quien mano a mano definió sin claridad y Andújar se impuso en el duelo.
Fueron varias las situaciones francas o en superioridad numérica que creó el Millonario. No concretó. Y a los 32 minutos, con una jugada con sello de su entrenador, el local puso el 1-1. La bajó Leandro Díaz, González tocó hacia atrás para Mauro Díaz, y el enlace surgido en River sacó a relucir su gambeta para abrirse espacio y definir cruzado.
Y en medio del empuje postrero de River, ante un Andújar que tuvo una noche soñada, llegó el golpe de nocaut de Estudiantes. En el minuto 50, tras una pelota parada, el talón de Aquiles de un Millonario que no puede resolver su falencia, Noguera se impuso en las alturas para decretar el 2-1, premio a un Pincha que no se dio por vencido, y castigo para la Banda, que no confirmó el resultado cuando tuvo las oportunidades, y que sigue adeudando la materia del balón detenido.