El Real Madrid ha vencido este domingo al Celta de Vigo (4-0) en el Santiago Bernabéu en partido de la jornada 28 de LaLiga EA Sports. El líder recupera su ventaja, recortada temporalmente tras las victorias de Barcelona y Girona, el viernes y el sábado.
Los goles vinieron con algo de fortuna, de Vinicius, Guaita y Domínguez, estos dos en propia meta, y pero no resta méritos a un Madrid muy superior. El turco Arda Güler, de 18 años, hizo el cuarto en el añadido. En los dos primeros fue protagonista el alemán Antonio Rüdiger, providencial en su remate de cabeza en sendos saques de esquina.
El Madrid se adelantó por insistencia y el primer gol fue reflejo de ello. El Celta pagó su planteamiento inicial defensivo y apenas tardó 20 minutos en verse en desventaja. Un saque de esquina lanzado por Luka Modric, cabezazo de Rüdiger y gran parada de Vicente Guaita, pero insuficiente ante Vinicius en boca de gol (minuto 21). No obstante, el bravo portero celtinha aún pudo sacarle una mano al brasileño antes del rechace definitivo.
Es el cuarto gol del brasileño en tres partidos, enchufado desde Mestalla, y el décimo en lo que va de Liga, asentándose como la alternativa a la ausencia de Jude Bellingham.
El conjunto dirigido por Rafa Benítez no pareció reaccionar, aunque lo intentara. No le duraba el balón porque la presión del Madrid funcionaba casi a la perfección, y el casi fueron un par de llegadas que apenas llevaron peligro. Tan solo un flojo disparo a las manos de Lunin de Aspas pasada la media hora. El capitán vigués tuvo en sus botas una falta lateral al descanso, pero su compañero Luca de la Torre no acertó con su cabezazo.
Con todo, el marcador era una buena noticia para el Celta, a la vista del dominio del Madrid. Al menos tenía 15 minutos para reflexionar y otros 45 para tratar de remontar el partido. Le podía beneficiar también que los de Carlo Ancelotti no terminaban de cerrar el partido.
El Celta no reacciona y el Madrid mata el partido
El paso de los minutos apenas supuso más cambios en el guion que el cansancio, porque el Madrid seguía dominando y llegando al área del Celta que al revés, pero no tenía ocasiones tan claras como en la primera parte. Los últimos 20 minutos fueron para Joselu Mato en lugar de Rodrygo. El internacional español tuvo una nada más entrar en un saque de esquina, pero el «uy» del Bernabéu también sonaba ya cansado.
Hacía falta algo más y lo tenía Rüdiger, de nuevo letal en el área a balón parado, pero de nuevo sin ser suyo el premio final. Su testarazo dio en el larguero y lo metió dentro de su propia portería el meta Guaita (minuto 79). Pero nadie le quita el mérito al central alemán en los dos tantos, ganando por alto a todos.
Pareció que el Celta le cogió el gusto a los autogoles, puesto que el tercero llegó de la misma manera. Un centro de Vinicius desde la izquierda buscaba a Valverde, pero no llegó el uruguayo al remate ni Guaita al despeje, lo que provocó que Domínguez la empujara involuntariamente al fondo de la portería (minuto 88).
El partido ya estaba terminado desde el 2-0, pero el tercer gol lo terminó de cerrar de manera definitiva. Los últimos minutos permitieron ver algo, muy poco, de Arda Güler y Dani Ceballos. Al menos se llevaron el aplauso con la jugada del cuarto, pase del español y sensacional definición del turco.