La noche del brasileño Raphael Claus fue pésima, en el 1-1 de Argentina contra Paraguay. Y tuvo un punto álgido que fue cuando le anuló el golazo de 2-1 a Messi, quien había definido de zurda, perfecto. Leo ya había arrancado mal con el árbitro, que no le cobró a los 14 minutos una falta sobre la derecha del ataque, y ya ahí le protestaba.
Luego, el 10 repitió su accionar cuando Claus cobró el penalcito de Martínez Quarta a Almirón. Se acercó el capitán y le reclamó, justamente por la falta que no le había cobrado cuatro minutos antes. Ya lo tenía apuntado Messi al brasileño, y la explosión llegó luego del 2-1 mal anulado (de hecho, Scaloni también bramó). Ya cuando iban a sacar del medio, Claus fue a ver el monitor, convocado por el equipo VAR.
Se la veía venir Messi, quien ya gritaba cuando el árbitro miraba el monitor. Se quedó viendo a Claus frente a la pantalla, y explotó cuando de gol suyo pasaba a cobrar falta de Nico González a Ángel Romero 27 segundos antes. Y ahí, en mitad de la cancha, le recriminó por la jugada y por las anteriores (también se había quejado por una mano que le habían cobrado). Y antes de que volviera a rodar la pelota, cebado, le tiró: «Ya nos cagaste dos veces», haciendo el dos con los dedos. Y la repitió: «Dos veces nos cagaste», como frase lapidaria.