El jugador de futbol Dani Alves, condenado por la Audiencia de Barcelona a cuatro años y medio de prisión por violar a una joven en una discoteca de Barcelona en 2022, recibirá 1,2 millones de la Hacienda española, condenada en otro caso sobre la fiscalidad del deportista.
El diario La Vanguardia publica este sábado la sentencia de la sección cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional, remitida al letrado del jugador el mismo día en que conoció su condena por violación.
En este segundo caso, la Audiencia Nacional estima el recurso presentado por el futbolista en contra del proceso abierto por Hacienda por el pago de los servicios de un agente FIFA. Con la nueva sentencia, Hacienda tiene que devolver a Dani Alves más de 1,2 millones de dólares.
Los abogados fiscalistas del brasileño, según el rotativo, tienen la intención de insistir ante la Agencia Tributaria para que proceda a la devolución de forma inmediata con la intención, según han adelantado, de que ese capital se presente como garantía de fianza para pedir la libertad provisional del jugador hasta que la sentencia por agresión sexual sea firme.
La abogada del futbolista por la agresión sexual, Inés Guardiola, recurrirá la sentencia por ese caso y en los próximos días pedirá la libertad del deportista al entender que con la sentencia dictada, menor que las penas de 9 y 12 años que pedían la Fiscalía y la acusación particular, ha desaparecido el riesgo de fuga elevado.
Alega su abogada, además, que Alves tiene otros antecedentes, tiene una vivienda en Esplugues de Llobregat (Barcelona) y entregó su pasaporte tras ser detenido el 20 de enero del año pasado, día en el que ingresó en prisión.
Alves tiene todas sus cuentas bancarias inmovilizadas desde su detención, por lo que no puede disponer de su dinero. A ello se suma el proceso judicial abierto en Brasil por su exmujer Dinorah Santana por la pensión de sus dos hijos, que ha conducido hasta el momento al embargo de todo su capital.
Esta es la causa por la que Alves tuvo que recurrir al padre de su amigo Neymar para pagar los 150.000 euros de responsabilidad civil que le reclamó el juzgado durante la instrucción del caso por violación, dinero que le ha servido de atenuante para rebajar la condena.