Dani Alves fue sancionado con dos partidos tras la roja directa que vio el domingo contra el Atlético de Madrid tras una entrada a Carrasco.
El brasileño, además, tampoco jugará el jueves 17 en la Europa League en el Camp Nou contra el Nápoles, ni la vuelta en Italia, el jueves 24, ya que no fue inscrito en la competición continental debido al límite de solo tres altas nuevas a partid del mercado invernal.
Con todo, Alves no reaparecerá hasta el partido del domingo 27 de febrero en el Camp Nou ante el Athletic.
Gil Manzano reflejó en el acta arbitral que la entrada de Alves fue «sin opciones de jugar el balón», un agravante que parece haber sido clave para que la sanción no fuera de un partido sino de dos, ya que según el artículo 114 del código disciplinario de la RFEF, «en aquellos casos en que la expulsión del terreno de juego se deba a situaciones en que el futbolista no hubiera tenido posibilidad de disputar el balón, la suspensión será de al menos, dos partidos».
