Redacción – Philippe Coutinho es esperado en Barcelona y su futuro se mantiene como la mayor preocupación en el seno del club azulgrana. Acelerando en el traspaso de Malcom, que podría concretarse en las próximas horas, y esperando a conocer los acontecimientos en Valencia que han frenado la negociación por Rafinha Alcántara, Coutinho personaliza un auténtico dolor de cabeza por cuanto el Barcelona, reconocieron a ESPN Deportes fuentes de la propia entidad, no tiene “ninguna propuesta” por su fichaje.

Después de haber desembolsado 135 millones de euros por su fichaje, contando los 15 en bonus que se sumaron a los 120 iniciales, en el Camp Nou, tal y como informó ESPN, estarían encantados si se recibiera una oferta que bordease los 100 millones, pero ni ha llegado ni, lo más preocupante, se espera en un plazo corto de tiempo.

La figura del PSG, con Neymar de por medio, sigue manteniéndose alrededor del Barça como una opción más factible de lo que se considera en el propio club. “No hay nada”, se explica, lacónicamente, desde los despachos de la entidad, dando a entender que ni el tan cacareado regreso de Ney ni el pase en su lugar de Coutinho a París se antoja una operación factible.

“Es uno más en la plantilla”, se concreta de puertas afuera, intentando rebajar la sensación de preocupación, que existe, y más teniendo en cuenta que a medida que avanzan las semanas se reducen las posibilidades de concretar su traspaso.

Y es que a poco más de una semana de cerrarse el mercado en Inglaterra la opción de la Premier League se empieza a desvanecer. Si el Liverpool, directamente, ya rechazó su posible regreso en boca de Jurgen Klopp, solo cabría esperar una llamada tan milagrosa como utópica desde Old Trafford… Siempre y cuando el Manchester United hiciera caja traspasando a Pogba al Real Madrid.

El Barça, que tiene muy encaminado el ingreso de cerca de 40 millones de euros desde el Zenit por el traspaso de Malcom, mantiene la esperanza de vender a Rafinha por 15, confiado en que se reconduzca la crisis en el Valencia y atendiendo también a que con cuatro semanas de mercado por delante no se quiere dar sensación de urgencia… Una urgencia que, por otra parte, sí tiene el canterano.

Valverde trasladó a Bartomeu su deseo de tener cerrada la plantilla antes de comenzar la Liga, en Bilbao el 16 o 17 de agosto, pero a estas horas ya es consciente de que esa posibilidad se antoja muy remota. Por un lado esperando a concretar el fichaje de Junior Firpo desde el Betis, ya adelantado por ESPN Deportes, y por otro pendiente tanto del culebrón Neymar como de un Coutinho cuya venta se sospecha cada día más improbable.

Tan entusiasmados con la integración supersónica de Frenkie de Jong como satisfechos con la adaptación, ya esperada, de un Antoine Griezmann que ha dado señales de entrar como un guante en el sistema de juego azulgrana, en el club se sostiene que Valverde tiene a sus órdenes una plantilla mejorada respecto a la pasada temporada, con el empuje de los canteranos personalizado en Riqui Puig o Carles Pérez y el paso adelante ofrecido durante estas primeras semanas de pretemporada de futbolistas como Dembélé, Todibo y hasta Rakitic, quien sin tener tampoco definido su futuro ha mostrado su intención de seguir siendo clave en el equipo.

Entre todo ello la figura de Coutinho se mantiene como la principal duda. Despedido por Messi en la Copa América con un abrazo y un “nos vemos en Barcelona” tras el partido entre Brasil y Argentina, su deseado, y esperado, traspaso está en punto muerto y el único mensaje que se traslada desde el Camp Nou es que el brasileño es, hoy, “uno más de la plantilla”.