El entrenador del Real España, Ramiro Martínez, lamentó haber perdido el clásico ante Marathón y dice que esa derrota les genera desánimo y malesta.
Además habló de la falta penal que no pitó el árbitro Melvin Matamoros de Luis Garrido a un jugador aurinegro.
“Siempre los perjudicados y los que quedamos callados somos nosotros, esta fue la gota que rebalsó el vaso. La parte arbitral la tengo que dejar para ustedes que son los entendidos, si tú me dices que estoy equivocado lo acepto, me estoy guiando por lo que me dicen los allegados al club, si no te cobran dos penales por supuesto que te sentís perjudicado”, dijo.
Agregó “en este lugar el no hablar no había funcionado. A nosotros le tienen una facilidad de expulsarnos jugadores y de no pitarnos penales. Un rival que se dedicó solo a destruir y donde nosotros tuvimos dos jugadas de penales que no se pitaron”.
Sobre la derrota expresó que “genera desánimo y malestar, en su momento tomamos esa decisión (dejar a Real España) porque no venían funcionando las cosas, el grupo respondió y levantamos la producción. Hoy si hubo un equipo que propuso fue el España y lastimosamente nos vamos con las manos vacías porque los muchachos lo demuestran que quieren sacar esto adelante”, declaró.
Además, dejó claro que no piensa en renunciar. “Para un entrenador tener el respaldo de sus jugadores y de la gente es gratificante, nosotros tenemos muy claros que no vamos a perjudicar al España… No se llama ni dinero ni ego, estamos al servicio de mis jugadores, nos dan la fuerza de seguir”, concluyó.